Alquileres vacacionales en Llanes

Vente a la tierrina y sumérgete en la Asturias más profunda visitando Pendueles, un pueblo costero pequeñito, pero con una riqueza natural muy grande. Este paraíso verde se encuentra dentro del concejo de Llanes, a un salto de los Picos de Europa. Pendueles presume de tener uno de esos paisajes tan bonitos que se te quedan grabados en la memoria: enormes prados repletos de vacas, imponentes montañas, las cabañitas de cuento de sus valles y verde y más verde que verás por donde mires. Pero aquí no solo hay montaña; también hay unas playas que son todo un espectáculo, como la curiosísima playa interior de Cobijeru. Déjate seducir por la cultura celta, disfruta del sonido de las gaitas y aprende a escanciar sidra en algún local mítico astur.

Es difícil acertar con el clima de Asturias, ya que un día puede amanecer nublado y al mediodía aparecer el sol, o al revés. Aunque en verano las temperaturas suelen ser suaves y agradables tirando a frescas dependiendo del día, se han llegado a registrar picos de 30 °C en la costa. En invierno también pueden caer nevadas en las cotas más elevadas. Por ello, no te confíes si hace bueno y lleva siempre alguna prenda que te abrigue en caso de que te sorprendan las temperaturas. Ah, y un imprescindible, el impermeable, ¡que aquí la lluvia se presenta cuando quiere!

Playa de Vidiago

Cuando llegues a la playa de Vidiago, es posible que la veas partida en dos por un saliente rocoso. ¡Sigue siendo la misma playa! Cuando hay bajamar, puedes ir de un lado a otro caminando sin problema, pero no te despistes por si sube mucho la marea. Si te apetece un paseo de una hora y unas vistas espectaculares, acércate hasta el Ídolo de Peña Tú, un símbolo del neolítico que aún conserva sus pinturas y grabados.

Tresgrandas

Enredaderas que trepan por las fachadas de las casas, montañas forradas de verde y unas vistas a la Sierra del Cuera que son simplemente de cuento. Visitar Tresgrandas, a 10 kilómetros de Pendueles, es hacer un parón en el tiempo y disfrutar sorbo a sorbo la magia de los pueblos asturianos. Aquí puedes montar a caballo, pasear en bici o remar en canoa en sus tranquilas aguas.

La Senda del Oso

En el siglo XIX, un tren minero que atravesaba el camino de la Senda del Oso dejó numerosos túneles que recorrerás si te acercas para hacer senderismo o darle a los pedales en este tramo de 60 kilómetros. Si vienes con niños, podréis intentar avistar juntos a dos de las osas pardas más famosas del lugar, ¡Paca y Molina!